sábado, 10 de abril de 2010

INTERNET: UNIÓN O ¿PÉRDIDA DE TIEMPO?





Un nuevo estudio realizado por  la Universidad de Toronto ha descubierto que, lejos de aislar a las personas en el ciberespacio, Internet fomenta las relaciones sociales y potencia la integración de las personas en la vida cotidiana. Sabemos que el progreso es, por naturaleza, ambivalente...La realidad es que las relaciones sociales tradicionales están evolucionando al ritmo de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones y que, en este contexto, el correo electrónico, los teléfonos móviles y la mensajería instantánea, adquieren progresiva importancia a la hora de articular las relaciones sociales. Ahora está de moda los juegos de la red internáutica - permitidme estos palabros -como "FARM VILLE" que, sinceramente, me pone de los nervios, porque puede, no digo que no, relajar al que está estresado...pero cuanto tiempo puede hacernos perder...; es verdad, que nos hace conocer personas, sí, pero la mayoría de las veces la intención no es esa... es, sencillamente, pasar el tiempo, relajarnos con algo que nos hace pensar como buscar frutas o cuidarlas para que no se pudran ( entendedme, por favor...). Cuánto tiempo gastamos mientras TANTA GENTE NOS NECESITA A NOSTROS, NUESTRO TIEMPO, NUESTRA PRESENCIA, NUESTRO CARIÑO, NUESTRA ORACIÓN, "NUESTRO" EVANGELIO...

Internet no debe ser considerada sin embargo como la única vía usada para relacionarse con otras personas. A veces nos volvemos autistas y consideramos que es la única herramienta que refuerza los lazos sociales, y no es así. El correo electrónico se ha convertido en una forma suplementaria de comunicación, que me da la sensación, y es mi opinión, llega a sustituir a otros medios.


Es cierto que Internet ayuda a construir el capital social de los internautas, ya que permite fabricar redes sociales sólidas aunque estén geográficamente dispersas. Aunque creo que hay que estar en el CIBERESPACIO, creo que debemos resituarlo.  El ciberespacio puede construirse en detrimento de otras relaciones sociales de proximidad como las familiares o de amistad. Y a esto debemos negarnos siempre. Es una buena herramienta para el encuentro personal ocasional, para el conocimiento de nuevas amistades, para una evangelización más desarrollada geográficamente o localmente, pero no debe arruinarnos la relación "piel a piel" y, menos, no debe arruinarnos nuestro tiempo y nuestra persona que tantas hermanos y hermanas están reclamando por su situación vital. Pensémoslo, hermaninos. Os comparto esta reflexión. Que el Señor os bendiga y os guarde en su amor santo. Kike.

VIDA SACERDOTAL Y VIDA RELIGIOSA






Hermaninos, las líneas que os escribo a continuación son el fruto madurado de una conversación muy agradable y constructiva que tuve con un hermano muy querido para mí por su vida y por su amistad siempre ofrecida y cultivada por amor a Cristo. Las he orado antes de escribirlas, porque la precipitación es el mayor enemigo de la vida cristiana. Allá voy, y como dicen los sainetes de la literatura clásica española, "perdonad ,queridos lectores, por mis faltas y pecados". Allá voy:

¿Cuál es el alcance de la vida consagrada en mi vocación al sacerdocio?  Esta cuestión no se puede explicitar en un blog y menos en breves palabras...Sin embargo, voy a abrir el corazón y voy  intentar abarcar esta pregunta lo más ceñido posible a mi experiencia y al sentir de la Santa Madre Iglesia. Está en juego algo muy profundo: cómo entiendo y vivo mi propia vocación dentro de la diversidad de carismas y ministerios que existen en la Iglesia. En la vida cotidiana del Seminario de Oviedo contamos con religiosas francicanas del Buen Consejo, amén de todas aquellas congregaciones que nos encontramos en nuestros destinos pastorales... ( en mi caso, las Hijas de la Caridad como Sociedad de Vida Apóstolica, y las Hermanitas de los ancianos desamparados de Pola de Siero ). Además, tenemos la suerte de albergar entre nosotros la presencia de la Intitución teresiana en la persona de Mercedes, formadora del Seminario Menor. Toda esta realidad en nuestra vida nos ha enseñado y nos enseña que la vida consagrada forma parte de la concepción carismática de la Iglesia, aunque no es de institución divina. Este dato lo asimilé intelectualmente en su día, pero con el contacto asiduo y espontáneo con algunos religiosos y religiosas he podido experimentar toda la amplia verdad que contiene esa sencilla fórmula. Efectivamente, la vida religiosa es sumamente importante en la Iglesia. A través de los religiosos y religiosas el Espíritu va actuando en el Pueblo de Dios de acuerdo con las necesidades que éste experimenta a lo largo de la historia. Así, cada carisma intenta dar un sentido y una respuesta evangélica desde la misma realidad a distintas situaciones fundamentales que el hombre de cada tiempo va padeciendo, en el sentido estricto y originario que este término tiene. Por eso desde siempre la vida consagrada ha tenido mucho que ver con lo profético. Los religiosos y religiosas son auténticos profetas de hoy. Hablando de las tres grandes vocaciones de la Iglesia, un cura amigo decía en una de sus homilías que los sacerdotes transparentan a Cristo, los laicos trans-forman el mundo y los consagrados trans-cienden la realidad. Dicho así de bonito o de otra forma menos ornamentada, lo cierto es que los religiosos y las religiosas remiten con sus vidas a “otra” realidad que, en el fondo, no es más que “esta” realidad, pero transformada enteramente por la fuerza del Evangelio de Jesucristo.Todo este discurso, que puede resultar tan teológico y espiritual a la vez, se traduce en una serie de aspectos muy concretos. Nunca dejo de sentirme interpelado cuando me encuentro con algún religioso o religiosa que vive radicalmente y con alegría los consejos evangélicos desde su propio carisma. Son un verdadero don para mí, y cuando digo verdadero es que es "verdadero" por eso lo acojo como lo debo de acoger y lo cuido como lo debo de cuidar sin extralimitarme a su propio dinamismo.

Hay personas que dan mayor preponderancia a la vida religiosa menoscabando la naturaleza, la misión y la santidad del ministerio ordenado o ministerio sacerdotal. El sacerdocio no ha nacido exclusivamente para mirarse en el espejo de la vida religiosa. Es una dimensión de su tarea pastoral, pero no es su espejo, valga la repetición. El sacerdote tiene como espejo a Cristo igual que la vida religiosa y Cristo hoy se manifiesta como ayer en su Iglesia y en los pobres. El sacerdote debe contagiarse por el gozo, el enamoramiento y la exclusión de todo por el Reino que nos ofrece la vida consagrada, pero nunca debe circunscribir su actividad solamente a "cuidar" porque las "monjas" o los "monjes" vivan como deben vivir su vida consagrada. La vida religiosa ha surgido, es verdad, con el tiempo como un regalo del Señor por medio de su Espíritu Santo para la costrucción de la comunidad cristiana ya que el misterio de Cristo es ¡¡¡tan prismático!!! que necesitamos catalejos plurifocales para intentar abarcar lo máximo posible este Sacrosanto Misterio. Y eso es lo que nos aportan. Nosotros deberíamos aportar la grandeza que se deriva del sacerdocio, Cristo, Cabeza, Maestro y Esposo de la Iglesia se hace presente para llevar al mundo por los pastos y vergeles del Evangelio.

Los religiosos y religiosas y los sacerdotes deben entenderse siempre a sí mismos como instrumentos al servicio de Dios, y no como los protagonistas de su misión. Sus vidas deben reflejar un real abandono en la voluntad de Aquel a quien siguen. Las diferentes tareas que desempeñan no siempre tienen en cuenta las programaciones pastorales de las diferentes diócesis en las que se encuentran. Incluso, a veces ni siquiera se informa de esas tareas. También es cierto que las mismas diócesis en ocasiones dificultan más que facilitan esa colaboración. Sin embargo, creo que generalmente la vida religiosa debería implicarse más en la vida de las diferentes Iglesias particulares y revisar la eclesiología que subyace a esta cuestión. Al fin y al cabo, todos participamos de la misma misión de la Iglesia, que es la misma misión de Cristo. Trabajar por una mayor comunión es tarea de todos los que nos decimos que somos seguidores del único Señor y Pastor de nuestras vidas que es Cristo. Que el Señor siga bendiciendo a su Iglesia con nuevas vocaciones al ministerio ordenado, especialmente en nuestra Archidiócesis de Oviedo y con florecientes almas que quieran consagrarse exclusivamente al Señor por la implantación gozosa de su Reino.  El Señor os bendiga y os guarde en su amor santo. Y María, la criatura más excelsa y Tres veces Admirable, nos ayude a vivir nuestra consagración bautismal (común a todos) en fidelidad a su Hijo , el Amor de los amores, como ella y nunca sin ella.  PAX ET BONUM. Kike.

jueves, 8 de abril de 2010

CONTEMPLAR AGRADECIDOS: Comentario al II domingo de Pascua, DOMINGO DE LA MISERICORDIA





Hay quien piensa que la resurrección de Jesús fue un momento deslumbrador que, de golpe y porrazo, cambió la vida de los discípulos. La realidad es que los Evangelio nos hablan más bien de un proceso lento. No me refiero a que Jesús resucitase poco a poco o a que la resurrección no sea más que el fruto de las reflexiones o meditaciones de aquella comunidad cristiana. Jesús no resucitó porque los discípulos lo pensasen sino que ellos no hicieron más que darse cuenta de lo que había sucedido. Lo que pasa es que ante acontecimiento tan inesperado, sorprendente, extraordinario, singular y fuera de lo común, los discípulos necesitaron un tiempo para asimilarlo, para digerirlo.



Algo así nos sucede a nosotros. Pasa que no nos damos cuenta porque llevamos hablando de la resurrección de Jesús casi desde que nacimos. Tanto hemos oído que nos parece normal. Lo malo es que en esa normalidad no nos damos cuenta de lo extraordinario del asunto y menos de sus consecuencias para nosotros. Seguimos como si tal cosa, como si algo tan sorprendente no fuera con nosotros.

 

¡Paz a vosotros!



Los discípulos necesitaron un tiempo. No se cambia la vida de la noche a la mañana. Ni de la mañana a la noche. Según nos cuenta el Evangelio de Juan, los discípulos se habían encerrado en una casa por miedo a los judíos. Y eso ¡el mismo día en que por la mañana habían recibido de las mujeres la noticia de la resurrección de Jesús y Pedro y el discípulo amado habían constatado la desaparición de su cuerpo! Jesús se les aparece y lo primero que les envía es un mensaje de consuelo: “Paz a vosotros”. Se identifica. Es el mismo Jesús que había muerto. Ahora está vivo.



Es difícil explicar con palabras esta parte de la historia. Los evangelistas se muestran muy parcos y austeros en su forma de hablar de Jesús resucitado. Nada que ver con los fantasmas que pueblan nuestra literatura o los castillos escoceses. La presencia de Jesús no atemoriza sino lo contrario. Uno de los efectos de esa presencia de Jesús entre los discípulos es que se les reaviva la memoria. Son capaces de recordar y, lo que es más importante, entender el sentido de todo lo que habían vivido con Jesús. Sus palabras, sus acciones, se llenan ahora de luz.



Creer no es conocer a Jesús. No es haber escuchado sus palabras. Ni siquiera es estar convencido de que su mensaje es bueno para la humanidad. Creer es haberse encontrado con Jesús y haber metido, como Tomás, los dedos en sus llagas y las manos en su costado. Creer es reconocer que en Jesús la vida ha triunfado sobre la muerte y que en él Dios ha abierto la humanidad a la esperanza de una vida nueva. Creer es dejar que el espíritu de Jesús resucitado se meta bien adentro en nuestros corazones y recree la esperanza. Creer es confiar en que el Abbá de Jesús respondió al órdago a la grande que le plantearon las autoridades judías cuando decidieron eliminar a Jesús. Creer es asumir con el corazón y con la vida que Dios está por nosotros, que se preocupa de nosotros, que somos sus hijos e hijas queridos, que nadie se queda fuera de su amor ni de su promesa de vida.

 

Tiempo de aleluya



En este domingo nos solemos fijar mucho en Tomas. De él se dice que era incrédulo. No creo que lo fuese mucho más que los otros discípulos. Ni siquiera más incrédulo que nosotros mismos. Simplemente pasa que no es fácil acoger una noticia tan sorprendente, tan buena, tan creadora de esperanza, como la resurrección. No se asimila en un momento. Hace falta tiempo. Nos hace falta tiempo.



Quizá sea esa la razón por la que la Iglesia dedica 40 días a la Cuaresma y 60 a la Pascua. Hasta va a ser más fácil convertirnos (Cuaresma) que creer en que el amor de Dios es tan grande que nos ha regalado en Jesús la vida plena, la vida para siempre (Pascua). Estamos empezando este tiempo de Pascua. No hay prisa. Ya llegará el tiempo para darnos cuenta de lo que significa en la práctica vivir creyendo en Jesús resucitado. Por ahora, basta con experimentar la misma alegría de los discípulos. Y con dejar que de nuestro corazón brote, agradecido, un continuo “¡aleluya!”

EL MATRIMONIO EN MI VOCACIÓN HACIA EL SACERDOCIO




EXPERIENCIA CON MATRIMONIOS



La Iglesia es comunión de ministerios y carismas. El pueblo de Dios es comunidad de personas. Todos somos iguales en dignidad. Lo más importante es lo que une a los bautizados que se expresa en complementariedad e intercambio de dones. Las mutuas relaciones entre las personas y las formas de vida son una fuente de vitalidad y crecimiento espiritual. En este año sacerdotal, el Papa nos invita a mirar a San Juan María Vianney, entre otros, como modelo de virtudes para los sacerdotes del s. XXI.



Además de esto, yo he encontrado en mi camino a otro tipo de personas, concretamente a matrimonios cristianos, que me han ayudado a encontrarme con mi vocación y me han estimulado en mi camino hacia el sacerdocio de Cristo en la Iglesia. ¿Sabéis a qué me me han ayudado?



1.A encontrarme con mi identidad y vocación sacerdotal, sobre todo en la dimensión humana y existencial.

2.A vivir mi celibato y afectividad sacerdotal.

3.A constatar el paralelismo que existe entre los dos sacramentos.



HACIA UNA IDENTIDAD SACERDOTAL

Junto a ellos, me he hecho esta pregunta concreta: ¿Quién soy yo, seminarista y futuro sacerdote?



Y me he respondido: yo soy un hombre, llamado a amar a la gente, a involucrarme en una relación con ellos, abierto a sus alegrías y enfrentamientos, capacitado para sanar y reconciliar. Un sacerdocio en clave de relación servicial.



Entiendo ahora claramente que ser sacerdote no es tanto hacer cosas buenas por y para los demás. Más que involucrarme en actividades como: administrar los sacramentos, celebrar la misa, predicar, es más bien establecer una relación íntima y profunda con mi gente que es la Iglesia, fomentando las relaciones de amor entre ellos.



A la vez, he descubierto que soy un hombre que se debe dejar amar. Esto significa: dejarme interpelar como persona y como futuro sacerdote. Significa también: estar en contacto con la persona que soy realmente, con mis sentimientos, siendo abierto y vulnerable.



He aprendido, junto a ellos, que, Dios mediante, deberé de ser un sacerdote que tendrá que dejar de protegerse detrás de sus seguridades. Ser capaz de afrontar riesgos, dejando un sistema clerical que tiene sus fallos , pero en el que me siento seguro para elegir construir la Iglesia-comunidad. Ser compañero de la gente al mismo nivel, sacerdote con ellos, no sólo para ellos.



Ellos me han enseñado que el sacerdote está llamado, no a dirigir en exclusiva, o cumplir una función, sino a pertenecer a una Comunidad real en la que cada uno tiene un sitio, sin superioridades, a caminar juntos con un mismo sueño. Con ellos y junto a ellos he experimentado a una Iglesia de hermanos, iguales por el Bautismo, con carismas distintos. Ellos me ayudan a vivir mi vocación "desclericalizada", y ayudado a vivir mi preparación hacia el Sacramento del orden, no sólo en clave jerárquica, sino en clave fraterna.



Me ayudan cada día a dialogar a nivel profundo y a compartir mi vida, no sólo a escucharlos y aconsejarlos, en la clásica dinámica de enseñante-discípulo.



Yo he aprendido, también, de los matrimonios lo que significa de verdad para mí estar casado con la comunidad. Observando sus vidas, he visto cómo se casan cada día, cómo se confrontan, cómo se escuchan ...



MI AFECTIVIDAD Y TERNURA



Los sacerdotes y vocacionados al mismo somos personas sexuadas. Necesitamos desarrollar nuestra afectividad y nuestra ternura. Estamos llamados a vivir en relación de amor tan intensa como en el matrimonio pero de forma distinta (Mt 19; I Cor 7, 7). Hemos renunciado a formar una familia pero no al amor.



El sacerdocio, como el matrimonio, es una aventura de amor con su gente y, en especial, con los más faltos de amor, con los solos y abandonados.



Esto significa que no debo retraerme en un comportamiento distante, inaccesible, de simple funcionario y de "solterón". Que debo tener una madurez afectiva.



"La madurez afectiva del sacerdote, -dice Juan Pablo II, supone ser consciente del puesto central del amor en la existencia humana. Su vida está privada de sentido si no se le revela el amor, si no se encuentra con el amor, si no lo experimenta y no lo hace propio, si no participa en él vivamente. Se trata de un amor que compromete a toda la persona, a nivel físico, psíquico y espiritual, y que se expresa mediante el significado "esponsal" del cuerpo humano, gracias al cual una persona se entrega a otra y la acoge" (Pastores dabo vobis, 44).


Todo esto no ha sido ni es fácil. Hay en mi interior ciertos miedos que acompañan mi vida afectiva: miedo a que, al abrirme a ellos, descubran mi pobreza y superficialidad. Miedo a manifestar mis emociones, a ser invadido por la ternura y a perder el control. Al mismo tiempo tengo miedo a caminar solo en la vida y a envejecer como un "solterón".



Pero el vivir ya antes de la consagración sacerdotal la castidad me está ayudando a ser más libre porque me lleva a ser honesto conmigo mismo viviendo en la verdad, sinceridad, limpieza y autenticidad en lo que doy, recibo, pido y rechazo; en lo que pienso, digo y hago. Me ayuda a crear lazos de unión con ellos sin dominarlos ni utilizarlos, a amarlos desde la gratuidad, sin pasar factura, sin serun mendigo de cariño y sin crear dependencia; a mostrarme ante ellos como soy, con mis limitaciones, sin falsedades ni máscaras, sin miedo a hacerme vulnerable. Alguien ha dicho que vivir la castidad, ayuda a "pedir con claridad, dar con generosidad, recibir con gratitud y rechazar con responsabilidad''. Esto yo lo he experimento en mi vida.



DOS SACRAMENTOS COMPLEMENTARIOS



En contacto con estos matrimonios he tomado conciencia del gran paralelismo que existe entre el sacramento del Matrimonio y el del Orden. He constatado que los dos son sacramentos relaciónales, que se fecundan mutuamente, sin superioridades ni dependencias de uno sobre otro. Son dos modos de hacer visible el amor de Cristo a su Iglesia.



He visto en los Matrimonios un compromiso de entrega mutua, de fidelidad, de fecundidad y de ser signo de la Alianza del amor de Dios. Y me han recordado que también debo vivir mi vocacion al sacerdocio  como un compromiso de entrega a la Iglesia mi esposa, de fidelidad, de fecundidad (dando vida, haciendo crecer a mi pueblo) y de ser signo y testigo de la Alianza de Dios como nosotros.



Al recordar mi vida y mi vocación que no es muy larga junto a tantos matrimonios comprometidos en su vida de relación, como son mis padres, Maria Jesús y Abel, Macu y Jose y otros muchos que me quedan en el tinterio... me siento tremendamente agradecido a ellos; me siento feliz y afortunado porque me están ayudando sin saberlo a vivir, de forma plenamente humana, mi vocación al sacerdocio. Os quiero mucho y seguid ayudándome con vuestra cristianía y fidelidad al Señor..., os necesito ahora y luego, sereís una preocupación permanente en mi ministerio sacerdotal futuro. Que el Señor os bendiga y os guarde. Kike.

EL EVANGELIO DE LA VIDA




DECÁLOGO SOBRE EL EVANGELIO DE LA VIDA




1. Amarás la vida concebida y no nacida; la vida humanan en su última fase; la vida herida y maltratada por la enfermedad o la violencia doméstica, con todas tus fuerzas, con todo tu corazón, con toda tu capacidad creativa, y esto de forma personal o asociada.



2. No tomarás la problemática de la vida como un aspecto secundario de tu responsabilidad apostólica. Apostar por la vida es un compromiso urgente en una sociedad secularizada que defiende el aborto como un derecho y la eutanasia como una posibilidad real en nuestro tiempo.



3. Santificarás el día a día de tu vida cristiana con la oración, la formación y la acción misionera. En las celebraciones litúrgicas tendrás en cuenta la cuestión de la vida especialmente en la “oración de los fieles”. La celebración de la Jornada de la vida (25 de marzo) tendrá un especial apoyo en todas las comunidades, movimientos y parroquias.



4. Honrarás a las familias abiertas a la vida, a los profesionales de la salud que hacen objeción de conciencia a las prácticas abortivas, a las asociaciones que apoyan la “cultura de la vida”, a las madres gestantes que luchan por sacar adelante al fruto de sus entrañas. Salvar una vida es el mejor regalo para construir futuro y sembrar esperanza.



5. No matarás ninguna iniciativa que defienda, apoye y trabaje por promover “la cultura de la vida” en los ámbitos educativos, en los medios de comunicación, en el ámbito sanitario, cultural y político. La permisividad social ente el aborto es una de las mayores tragedias de nuestro tiempo.



6. No cometerás la imprudencia de pensar que tú solo puedes modificar los criterios, mentalidades y decisiones políticas que atentan contra la vida. Buscarás con otras personas, preferentemente de forma asociada, la mejor manera de influir en el cambio de ruta para que las nuevas generaciones sean más sensibles al valor fundamental de la vida humana y a su desarrollo integral.



7. No hurtarás esfuerzos, aunque sea hasta el agotamiento, por trabajar al servicio del Evangelio de la vida, sobre todo en la ayuda a las familias, en la búsqueda de los medios institucionales que apoyen las situaciones dramáticas de familias inmigrantes, separadas, rotas y que no saben cómo ayudar a los hijos con problemas de violencia e integración social.



8. No caerás en la tentación de echar siempre la culpa a los demás, sin movilizarte con toda persona de buena voluntad en la denuncia de situaciones de injusticia ante los atentados a la vida humana, y a cualquier vida, en la defensa de la naturaleza, anunciando y proponiendo la “cultura de la vida” que mejora nuestra existencia y la del planeta en el que vivimos.



9. Trabajarás en los medios de comunicación y en todas las posibilidades de las nuevas tecnologías para dar a conocer todas las iniciativas que hacen un servicio a la calidad de la vida. Las catequesis y escuelas de formación incluirán la doctrina católica sobre el valor de la vida humana y las exigencias de la ética cristiana.



10. La civilización del amor sólo será posible con hombres y mujeres, con familias y comunidades, con movimientos y asociaciones que vivan el Evangelio de Jesucristo, Verdad, Vida y Camino. De cómo vivamos nosotros este compromiso dependerá que otros: niños, jóvenes y adultos descubran qué significa la vida humana, qué nos aporta la fe y cómo se puede vivir en la comunión con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, no sólo para este tiempo, sino para siempre, más allá de los límites de la muerte. ¡Dios es amor y vida plena, Dios nos hace libres para vivir como hermanos de todos los hombres!



José Antonio González Montoto. Vicario Episcopal par la familia

Avilés 28 de febrero 2008

sábado, 20 de marzo de 2010

CUANDO SEA VIEJO


La edad trae una etapa en la vida que no siempre es fácil de llevar, y donde tenemos que ser más comprensivos que nunca.



El día que esté viejo y ya no sea el mismo, ten paciencia y compréndeme.



Cuando derrame comida sobre mi camisa y olvide cómo atarme mis zapatos, recuerda las horas que pase enseñándote a hacer las mismas cosas.



Si cuando conversas conmigo, repito y repito las mismas palabras que sabes de sobra como termina, no me interrumpas y escúchame. Cuando eras pequeño(a) para que te durmieras tuve que contarte miles de veces el mismo cuento hasta que cerrabas los ojitos.



Cuando estemos reunidos y sin querer haga mis necesidades, no te avergüences y compréndeme que no tengo la culpa de ello, pues ya no puedo controlarlas. Piensa cuantas veces cuando niño(a) te ayude y estuve paciente a tu lado esperando a que terminaras lo que estabas haciendo.



No me reproches porque no quiera bañarme; no me regañes por ello. Recuerda los momentos que te perseguí y los mil pretextos que te inventaba para hacerte más agradable tu aseo. Acéptame y perdóname. Ya que soy el niño ahora.



Cuando me veas inútil e ignorante frente a todas las cosas tecnológicas que ya no podré entender, te suplico que me des todo el tiempo que sea necesario para no lastimarme con tu sonrisa burlona. Acuérdate que yo fui quien te enseñó tantas cosas. Comer, vestirte y tu educación para enfrentar la vida tan bien como lo haces, son producto de mi esfuerzo y perseverancia por ti.



Cuando en algún tiempo mientras conversamos me llegue a olvidar de que estamos hablando, dame todo el tiempo que sea necesario hasta que yo recuerde, y si no puedo hacerlo no te burles de mí; tal vez no era importante lo que hablaba y me conforme con que me escuches en ese momento.



Si alguna vez ya no quiero comer, no me insistas. Sé cuanto puedo y cuanto no debo. También comprende que con el tiempo ya no tengo dientes para morder ni gusto para sentir.



Cuando me fallen mis piernas por estar cansadas para andar, dame tu mano tierna para apoyarme como lo hice yo cuando comenzaste a caminar con tus débiles piernas.



Por último, cuando algún día me oigas decir que ya no quiero vivir y solo quiero morir, no te enfades. Algún día entenderás que esto no tiene que ver con tu cariño o cuánto te ame. Trata de comprender que ya no vivo sino que sobrevivo, y eso no es vivir.



Siempre quise lo mejor para ti y he preparado los caminos que has debido recorrer. Piensa entonces que con el paso que me adelanto a dar estaré construyendo para ti otra ruta en otro tiempo, pero siempre contigo.



No te sientas triste o impotente por verme como me ves. Dame tu corazón, compréndeme y apóyame como lo hice cuando empezaste a vivir. De la misma manera como te he acompañado en tu sendero te ruego me acompañes a terminar el mío. Dame amor y paciencia, que te devolveré gratitud y sonrisas con el inmenso amor que tengo por ti.

COMO EL LÁPIZ



El niñito miraba al abuelo escribir una carta. En un momento dado le preguntó:



- ¿Abuelo, estás escribiendo una historia que nos pasó a los dos? ¿Es, por casualidad, una historia sobre mí?



El abuelo dejó de escribir, sonrió y le dijo al nieto:



- Estoy escribiendo sobre ti, es cierto. Sin embargo, más importante que las palabras, es el lápiz que estoy usando. Me gustaría que tú fueses como él cuando crezcas.



El nieto miró el lápiz intrigado, y no vio nada de especial en él, y preguntó:



- ¿Qué tiene de particular ese lápiz?



El abuelo le respondió:



- Todo depende del modo en que mires las cosas. Hay en él cinco cualidades que, si consigues mantenerlas, harán siempre de ti una persona en paz con el mundo.



Primera cualidad: Puedes hacer grandes cosas, pero no olvides nunca que existe una mano que guía tus pasos. Esta mano la llamamos Dios, y Él siempre te conducirá en dirección a su voluntad.



Segunda cualidad: De vez en cuando necesitas dejar lo que estás escribiendo y usar el sacapuntas. Eso hace que el lápiz sufra un poco, pero al final, estará más afilado. Por lo tanto, debes ser capaz de soportar algunos dolores, porque te harán mejor persona.



Tercera cualidad: El lápiz siempre permite que usemos una goma para borrar aquello que está mal. Entiende que corregir algo que hemos hecho no es necesariamente algo malo, sino algo importante para mantenernos en el camino de la justicia.



Cuarta cualidad: Lo que realmente importa en el lápiz no es la madera ni su forma exterior, sino el grafito que hay dentro. Por lo tanto, cuida siempre de lo que sucede en tu interior.



Quinta cualidad: Siempre deja una marca. De la misma manera, has de saber que todo lo que hagas en la vida, dejará trazos. Por eso intenta ser consciente de cada acción

EL TRIPLE FILTRO DE SÓCRATES




En la antigua Grecia, Sócrates fue famoso por su sabiduría y por el gran respeto que profesaba a todos.



Un día un conocido se encontró con el gran filósofo y le dijo:



- ¿Sabes lo que escuché acerca de tu amigo?



- Espera un minuto - replicó Sócrates. Antes de decirme nada quisiera que pasaras un pequeño examen. Yo lo llamo el examen del triple filtro.



- ¿Triple filtro?



-Correcto -continuó Sócrates. Antes de que me hables sobre mi amigo, puede ser una buena idea filtrar tres veces lo que vas a decir. Es por eso que lo llamo el examen del triple filtro. El primer filtro es la verdad. ¿Estás absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es cierto?



- No -dijo el hombre-, realmente solo escuché sobre eso y...



- Bien -dijo Sócrates. Entonces realmente no sabes si es cierto o no.



- Ahora permíteme aplicar el segundo filtro, el filtro de la bondad. ¿Es algo bueno lo que vas a decirme de mi amigo?



- No, por el contrario...



- Entonces, deseas decirme algo malo sobre él, pero no estás seguro de que sea cierto.



Pero podría querer escucharlo porque queda un filtro: el filtro de la  utilidad. ¿Me servirá de algo saber lo que vas a decirme de mi amigo?



- No, la verdad que no.



- Bien -concluyó Sócrates-, si lo que deseas decirme no es cierto, ni  bueno, e incluso no es útil ¿para qué querría saberlo?



Usa este triple filtro cada vez que oigas comentarios sobre alguno de  tus amigos cercanos y queridos...

LOS HERMANOS QUE DIOS NOS PUSO AL LADO: EL MEJOR REGALO





Las personas son regalos que la vida me ha dado.

Ya vienen envueltas, algunas en forma muy bella y otras

de una manera menos atractiva.



Algunos han sido maltratados en el correo; otros llegan

como "Entrega Especial";

Algunos llegan envueltos, otros cerrados con gran

rigidez.



Pero la envoltura no es el regalo y es importante darse

cuenta de esto.

Es muy fácil equivocarse en este sentido, juzgando el

contenido por el estuche.



A veces el regalo se abre con facilidad; otras se

necesita la ayuda de otras personas.



Tal vez es porque tiene miedo, quizá han sido heridas

antes y no quieren ser lastimadas de nuevo.



Pudo ser que alguna vez se abrieron y luego se

descartaron.

Quizá ahora se sienten más bien como "cosas" que como

seres humanos.



Yo soy una persona. Como todas las demás personas

también soy un regalo. Poseo una bondad que es sólo mía.



Y sin embargo, algunas veces tengo miedo de mirar dentro

de mi envoltura.



Tal vez temo decepcionarme, quizá no confío en el que

llevo dentro. Pudiera ser que en realidad nunca he

aceptado el regalo que soy.



Cada encuentro y comunicación entre personas es un

intercambio de regalos.



Mi regalo soy yo, tú eres tu regalo.

Somo obsequios de Dios unos para otros.



Es difícil pensar en ocasiones que aquel que me ha

lastimado es también un regalo de Dios, pero si vemos la

ofensa como una envoltura maltratada y no nos quedamos

con ella, seguramente encontraremos un hermoso regalo,

pues de cada suceso Dios nos tiene una enseñanza para

crecer en su amor, en nuestra fe.........



Nosotros mismos podemos tener una envoltura tan

maltratada por el tiempo y/o las circunstancias, pero lo

que llevamos dentro siempre será hermoso, pues quien lo

puso ahí es nuestro Creador, solo tendríamos que ver

hacia adentro y estar listos para darnos.......descubre

en tu interior todos los dones con los que El Señor te

conformó y sé el digno regalo para los que te

necesitamos.

LAS HERRAMIENTAS DE SAN JOSÉ



1.El sueño. Yo dormía, pero mi corazón estaba vigilante (Cant 5,2). Siempre estuvo dispuesto a escuchar la llamada. Y, cuando despertó, se puso en marcha para cumplir los planes de Dios. Sus sentidos externos parecían dormidos pero, los internos, estaban en comunicación con el Creador.


2.La disponibilidad. La llamada de Dios informará su vida entera en adelante. Hay un texto de la Escritura que viene aquí a propósito: el anuncio que Jesús hace a Pedro cuando le dice: Te llevarán adonde tú no quieras ir (Jn 21,10). José, con su rapidez, lo ha hecho regla de su vida: porque se halla preparado para dejarse conducir, aunque la dirección no sea la que él quiere. Su vida entera es una historia de correspondencias de este tipo.

3.El silencio. Ni una sola palabra, los evangelios, ponen en los labios de San José. En su silencio quedarán sepultados todos sus padecimientos y esperanzas. La vida de este hombre no ha sido la del que, pretendiendo realizarse a sí mismo, busca en sí solamente los recursos que necesita para hacer de su vida lo que quiere. Ha sido el hombre que se niega a sí mismo, que se deja llevar adonde no quería. No ha hecho de su vida cosa propia, sino cosa que dar (Benedicto XVI)

4.La humildad. Antepuso, desde el principio, la grandeza de Dios a su propia pobreza. Cuántos interrogantes surcarían su mente: “por qué a mí; por qué yo; por qué a María”. San José nos ha enseñado, con su renuncia y con su abandono que en cierto modo adelantaba la imitación de Jesús crucificado, los caminos de la fidelidad, de la resurrección y de la vida.

5.La fe. Fue la respuesta de José a todas las exigencias de Dios. También, como María, tuvo su personal anunciación. El seria el padre legal de Jesús, hijo de María, y María su esposa. ¿Cuál fue su reacción? Creyó, se puso en camino y esperó. Respetó, como Maria, los misterios de la Salvación, los designios de Dios.

6.El trabajo. Su oficio de carpintero lo plasmó con humildad y generosidad en Nazaret. Fue la escuela y el hogar de Jesús. Trabajo y sufrimiento (todo mezclado) salió al paso de San José. No fue un camino de rosas su existencia pero, por su actitud generosa, encontró siempre la mano de Dios.

7.El sufrimiento. Los planes de Dios sobre María, las posadas que se cerraban ante el nacimiento de Cristo, la indigna morada donde el Salvador vino al mundo, Jesús perdido entre la multitud. Interiorizó todos estos acontecimientos aunque, a simple vista, le pareciesen incomprensibles e injustos.

8.La obediencia. Resquebrajados los planes de su vida personal y familiar, José, se abrió sin fisuras a la voluntad de Dios. Soñó, y en esos divinos sueños, entendió y comprendió que Dios le pedía un gran sacrificio: acompañar a María y ser responsable, el padre terreno de Jesús cuando naciera. Facilitó primacía, en todo, a Dios.

9.El servicio. Fue feliz sirviendo a la causa del Señor. No siempre, el ruido, hace bien y….casi siempre el bien no hace excesivo ruido. San José es el hombre que, sin fuegos artificiales, se entrega con fidelidad y prudencia a los deseos del Señor.

10.La esperanza. Nada de lo que aconteció a su alrededor le hizo perder la calma ni la serenidad. San José refleja la persona que aguarda, que persevera y que permanece firme en sus convicciones a pesar de las dificultades. Como Abraham, con razón se dice fue capaz de “esperar contra toda esperanza”. Padre por y en la fe.

jueves, 18 de marzo de 2010

SOLEMNIDAD DE SAN JOSÉ: "el criado fiel y solícito que el Señor puso al frente de su familia"




Os dejo un video acerca de aquél cuya solemnidad celebramos hoy. Para mí el día 19 de marzo tiene una significación especial: he nacido en este día bajo su intercesión y bajo su ejemplaridad como el fiel custodio de los Misterios santos: Jesús y María, su esposa. Es el patrono de las vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada, amén de ser custodio de la Iglesia universal. No sólo he nacido en el día de su festividad sino que también he sentido la llamada al ministerio sacerdotal. Tengo a mi alcance la santidad sencilla de José labrada a fuego en las cosas cotidianas hechas perfectamente en el amor; y acrisolada, además, en el trabajo de custodiar a nuestro Señor. ¿Cuál es la vida de un sacerdote? Sin duda, hacer presente sacramentalmente a nuestro Señor, con las actitudes de justicia, de fe, de silencio y de fidelidad y solicitud de José.

¡¡¡FELIZ MEMORIA SOLEMNE DE SAN JOSÉ!!! TOMADLO COMO COMPAÑERO DE VIAJE EN EL CAMINO DE VUESTRA VOCACION PARTICULAR.







ORACIÓN A SAN JOSÉ


San José,


casto esposo de la Virgen María;

intercede para obtenerme

el don de la pureza



Tú que a pesar de tus inseguridades personales,

supiste aceptar dócilmente el Plan de Dios tan pronto supiste de él, ayúdame a tener esa misma actitud para responder siempre y en todo lugar a lo que el Señor me pida.



Varón prudente, que no te apegas a las seguridades humanas,

sino que siempre estuviste abierto a responder a lo inesperado, obténme el auxilio del divino Espíritu para que viva yo también en prudente desasimiento de las seguridades terrenales.



Modelo de celo, de trabajo constante, de fidelidad silenciosa, de paternal solicitud, obténme esas bendiciones para que pueda crecer cada día más en ellas y así asemejarme, día a día, al modelo de la plena humanidad: el Señor Jesús.



Amén



jueves, 25 de febrero de 2010

ESTAMOS ANTE UNA SEMANA DURA... TENEMOS QUE SEGUIR LUCHANDO POR LA VIDA, SOBRE TODO, POR LA DEL MÁS INDEFENSO: NO NACIDO, POBRE Y EXPLOTADO, ANCIANO...


OS PONGO A GRANDES RASGOS TODO LO QUE HA OCURRIDO CON LA FAMOSA LEY DEL ABORTO, ASÍ COMO LA INICIATIVA DEL ACTUAL GOBIERNO. VED EL VIDEO DEL FINAL...

El Consejo de Ministros aprobó este jueves el anteproyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo y Salud Sexual y Reproductiva, que contempla el aborto libre hasta la semana 14 y hasta la 22 en caso de riesgo de la vida o salud de la mujer o graves anomalías en el feto. Pasado este tiempo, "sólo se podría abortar en caso de problemas del feto que sean incompatibles con la vida".¿Y en el caso de riesgo para la vida de la madre? "En ese caso se hablaría de parto inducido, no de aborto..."

Según Aído, trata de dar coherencia al marco jurídico y evitar intervenciones clandestinasAsí, se podrá interrumpir voluntariamente el embarazo sin alegar un porqué dentro de las primeras 14 semanas de gestación -como recomendó al ministerio el pasado mes de marzo el Comité de Expertos- y permitir a las mujeres de 16 y 17 años tomar esa decisión sin que se vean obligadas a contárselo a sus padres. Esto, según la ministra de Igualdad Bibiana Aído, trata de dar coherencia al marco jurídico y evitar intervenciones clandestinas.

Por otro lado, la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) será una prestación pública y gratuita, y el Estado velará por su cumplimiento en todas las Comunidades Autónomas a través de la Alta Inspección Sanitaria.





La información, en un sobre cerrado



Este mismo jueves se ha sabido que cualquier mujer que decida abortar recibirá un sobre cerrado con información sanitaria y social con sus derechos y ayudas por si prefiere continuar con la gestación. Dentro también habrá folletos con los pros y contras de abortar, así como los centro donde puede hacerlo.



Recibirán folletos con los pros y contras de abortarLas mujeres tendrán al menos tres días para reflexionar antes de decidir si siguen adelante con la interrupción del embarazo, es decir, ninguna mujer podrá hacerlo a las 48 horas. "Garantiza a las mujeres la posibilidad de tomar una decisión libre e informada sobre la interrupción del embarazo dentro de las primeras 14 semanas", agregó Aído.





¿Cuáles son los pasos hasta que se apruebe la ley definitivamente?



Igualdad espera que la nueva ley esté aprobada en seis meses, aproximadamente.El anteproyecto debe pasar ahora por el Consejo Fiscal y el Consejo General del Poder Judicial. Luego volverá al Consejo de Ministros con el fin de poder introducir modificaciones antes de iniciar su trámite parlamentario: Congreso y Senado. El ministerio de Igualdad espera que la nueva ley esté aprobada "a finales de este año 2009 o principios de 2010". Es decir, dentro de aproximadamente seis meses.





Con la ley actual, ¿se puede interrumpir el embarazo?





En España, actualmente es legal interrumpir voluntariamente el embarazo en el caso de los siguientes supuestos y plazos:
Si hay grave peligro para la vida o salud física o psíquica de la embarazada (para lo que no hay límite de semanas de gestación).

En caso de embarazo consumado en una violación de la que exista denuncia policial (hasta las 12 semanas).

El tercer supuesto es la presencia de "graves taras físicas o psíquicas para el feto", es decir, anomalías fetales incompatibles con la vida, alteraciones cromosómicas o defectos mayores del desarrollo del feto que comprometan su vida como persona sana. A este supuesto se lo denomina aborto eugenésico (hasta la semana 22).


Comparativa: las principales diferencias



Ley del aborto actual (1985)

Reforma de la ley (2009)

- Ley de indicaciones: 1985

Constituye un delito despenalizado en tres supuestos: si el embarazo es fruto de una violación -se permite en las 12 primeras semanas de gestación-, si el feto presenta graves taras físicas o psíquicas -el plazo es de 22 semanas- o si hay peligro para la vida de la madre o para su salud física o psíquica -en este supuesto no hay tiempo máximo-.

- Ley de plazos: 2009


El aborto será libre hasta las 14 semanas. Hasta las 22 semanas si hay grave riesgo para la vida o salud de la mujer o graves anomalías en el feto -si se descubren anomalías incompatibles con la vida o enfermedad extremadamente grave e incurable no hay límite. En este caso, un comité médico dictaminará su pertinencia.


- Sanidad 1985

Menos del 3% de los abortos se practican en centros públicos. Algunas comunidades, financian estos servicios en otros centros.

- Sanidad 2009

La sanidad pública sí garantizará la práctica del aborto o, al menos, lo financiará en centros privados concertados.





- Penalizaciones 1985

Un aborto fuera de la ley podría enviar a la cárcel al médico -de 1 a 3 años- así como quedar inhabilitado entre uno y seis años. Para la mujer, podría haber pena de prisión, de seis meses a un año, o una multa.

- Penalizaciones 2009

Desaparece la pena de cárcel para la mujer que aborte fuera de los casos permitidos. Se prevén multas que dependerán de las circunstancias. Para el médico, cárcel de uno a tres años e inhabilitación de uno a seis.



VALORACIÓN Y JUICIO EVANGELICO


ME REMITO AL APARTADO DE ESTE BLOG: "PLAZA PUBLICA", TEMAS QUE NOS INTERESAN.



miércoles, 24 de febrero de 2010

ORACIÓN POR UN BEBÉ ABORTADO

GRACIAS, MACU, POR TU APORTACIÓN AL BLOG. A MÍ ME IMPRESIONA ESTA ORACIÓN. ESTE BLOG ES PRO-VIDA, SOY CRISTIANO Y EL CRISTIANO, ESTÁ EN LA DEFENSA DE TODO EL HOMBRE Y DE TODO HOMBRE;  SOBRE TODO AQUEL QUE NO PUEDE DEFENDERSE POR SÍ MISMO. LA VIDA ES DE DIOS, NOSOTROS DEBEMOS CUIDARLA, PROMOCIONARLA, PROTEGERLA EN SU DIGNIDAD...


martes, 23 de febrero de 2010

OS INVITO A REZAR TODOS LOS DÍAS ESTA SENCILLA ORACIÓN DE CONSAGRACIÓN AL SEÑOR, NUESTRO BUEN PASTOR. ¡¡SOMOS SUYOS, SU PUEBLO Y OVEJAS DE SU REBAÑO!!








Jesús, Buen Pastor, queremos seguir tus pasos.

Danos tu Espíritu, para aprender a vivir en la misericordia.

Ayúdanos a descubrir la gratuidad de tu amor,

entrega generosa, don de vida que se regala.

Danos tu Espíritu, Jesús, Buen Pastor,

para perseverar en nuestra búsqueda,

para seguir en camino,

para animarnos a la esperanza activa

de hacer un Reino de paz

y de bondad para todos.

Danos tu Espíritu, Jesús,

para seguirte, para imitar tu entrega,

para hacer el bien en nuestros días,

en el camino de cada uno,

para vivir en la bondad,

caminando hacia el Reino.
 
 
SEÑOR, NOS CONSAGRAMOS A TU AMOR;
QUE ÉL SEA MAS FUERTE QUE NUESTRO PECADO
Y QUE NUESTRA MUERTE.
EN TU MISERICORDIA CONFIAMOS.
 
AMEN.

lunes, 22 de febrero de 2010

OS INVITO A ENTRAR EN EL APARTADO DE EL DESIERTO... ENCONTRARÉIS MATERIAL ACERCA DE QUÉ ES LA ORACIÓN Y QUÉ ES ORAR

ADEMÁS OS OFREZCO DOS VIDEOS PARA LA REFLEXIÓN PERSONAL O COMUNITARIA





 

UN VIDEO PARA LOS PEQUES: EVANGELIO DE LA OVEJA PERDIDA

A MI ME ENTERNECE TANTO LA HISTORIA DEL EVANGELIO COMO LA FORMA EN QUE ESTÁ CONTADA Y REPRESENTADA EN ESTE VIDEO. REVIVID CON CORAZON DE NIÑO ESTA PARÁBOLA... DEJAOS ESPONJAR POR EL VIDEO... PODÉIS PONERSELO A VUESTROS PEQUES...

HOMILIA SOBRE EL MISTERIO DE CRISTO COMO BUEN PASTOR DE SAN GREGORIO MAGNO





De las homilías de san Gregorio Magno, papa, sobre los evangelios (Homilía 14, 3-6: PL 76,1129-1130)






Yo soy el buen Pastor, que conozco a mis ovejas, es decir, que las amo, y las mías me conocen. Habla, pues como si quisiera dar a entender a las claras: «Los que me aman vienen tras de mí». Pues el que no ama la verdad es que no la ha conocido todavía.



Acabáis de escuchar, queridos hermanos, el riesgo que corren los pastores; calibrad también, en las palabras del Señor, el que corréis también vosotros. Mirad si sois; en verdad, sus ovejas, si le conocéis, si habéis alcanzado la luz de su verdad. Si le conocéis, digo, no sólo por la fe sino también por el amor; no sólo por la credulidad, sino también por las obras. Porque el mismo Juan Evangelista que nos dice lo que acabamos de oír, añade también Quien dice: «Yo le conozco», y no guarda sus mandamientos, es un mentiroso.



Por ello dice también el Señor en el texto que comentamos: Igual que el Padre me conoce, y yo conozco al Padre yo doy mi vida por las ovejas. Como si dijera claramente «La prueba de que conozco al Padre y el Padre me conoce a mí está en que entrego mi vida por mis ovejas; es decir: en la caridad con que muero por mis ovejas, pongo de manifiesto mi amor por el Padre.»



Y de nuevo vuelve a referirse a sus ovejas, diciendo: Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna. Y un poco antes había dicho: Quien entre por mi se salvar, y podrá entrar y salir, y encontrar pastos. O sea, tendrá acceso a la fe, y pasará luego de la fe a la visión, de la credulidad a la contemplación, y encontrar pastos en el eterno descanso.



Sus ovejas encuentran pastos, porque quienquiera que siga al Señor con corazón sencillo se nutrirá con un alimento de eterno verdor. ¿Cuáles son, en efecto, los pastos de estas ovejas, sino los gozos eternos de un paraíso inmarchitable? Los pastos de los elegidos son la visión del rostro de Dios, con cuya plena contemplación la mente se sacia eternamente.



Busquemos, por tanto, hermanos queridísimos, estos pastos, en los que podremos disfrutar en compañía de tan gran asamblea de santos. El mismo aire festivo de los que ya se alegran allí nos invita. Levantemos, por tanto, nuestros ánimos, hermanos; vuelva a enfervorizarse nuestra fe, ardan nuestros anhelos por las cosas del cielo, porque amar de esta forma ya es ponerse en camino.



Que ninguna adversidad pueda alejarnos del júbilo de la solemnidad interior, puesto que, cuando alguien desea de verdad ir a un lugar, las asperezas del camino, cualesquiera que sean, no pueden impedírselo.



Que tampoco ninguna prosperidad, por sugestiva que sea, nos seduzca, pues no deja de ser estúpido el caminante que, ante el espectáculo de una campiña atractiva en medio de su viaje, se olvida de la meta a la que se dirigía.

domingo, 21 de febrero de 2010

"BUCEA" EN ESTE VIDEO, Y MIRA LA CARTA DE AMOR QUE DIOS TE ENVIA EN ESTE DÍA

UN VIDEO CON MORALEJA: AQUÍ SE REPRESENTA LO QUE DIOS HIZO CON NOSOTROS

DAMOS A MARCOS LAS GRACIAS POR HABERNOS ENVIADO ESTE ENLACE, QUE SIN DUDA SERVIRÁ DE AYUDA ESPIRITUAL Y DE REFLEXION A TODOS LOS QUE COMPONEMOS LA GRAN FAMILIA DEL BUEN PASTOR.


TODOS POR LA VIDA DIGNA DEL NO-NACIDO PERO YA CONCEBIDO EN LA MENTE DE DIOS Y EN EL VIENTRE MATERNO

En estos días en que tratamos de comenzar a andar otros caminos como cristianos y como personas, seres humanos que poblamos esta tierra, creo que es bueno dar nuestro apoyo a la lucha por el DERECHO A VIVIR que tenemos todos. Aún podemos cambiar las leyes, aún podemos pedirle a los que deben estampar su firma que no lo hagan. Aún podemos luchar para que sean escuchados los que no pueden hablar.

Os invito a entrar en el apartado de PLAZA PÚBLICA: TEMAS QUE NOS INTERESAN. Allí encontraréis cien cuestiones con sus respectivas respuestas acerca del aborto.


sábado, 20 de febrero de 2010

TODO ES PARTE DEL PROPÓSITO DE DIOS Y TODO SALDRÁ BIEN. PON TU CONFIANZA EN SU AMOR DE PADRE.

HAY MUCHA GENTE QUE LO ESTÁ PASANDO MAL EN ESTOS MOMENTOS POR LA PÉRDIDA DE UN SER QUERIDO O POR UNA ENFERMEDAD PERSONAL. ESTE VIDEO VA DEDICADO A ELLOS. GUARDAD EN EL CORAZON SIEMPRE QUE TODO ESTÁ EN EL PROYECTO DE DIOS. EL NOS HA CREADO POR AMOR Y PARA VIVIR EN PLENITUD. SU ÚLTIMA PALABRA SERÁ DE VIDA. VIVAMOS DESDE LA FE, LA ESPERANZA Y LA CARIDAD. IMPLORÉMOSLAS CADA DÍA AL SEÑOR.



EL PAN COTIDIANO DE LA PALABRA DE DIOS: 1º DOMINGO DE CUARESMA




 
Domingo 1º de Cuaresma
"No sólo de pan vive el hombre"
 Lc 4, 1-13



PERDER O GANAR



Era tentado por el demonio



En la vida no todo es crecer, avanzar o ganar. Hay muchos momentos en que la persona puede conocer la crisis sicológica, la enfermedad física o el oscurecimiento de la luz. Algo se rompe entonces en nosotros. Comenzamos a experimentar la vida como pérdida, límite o disminución. Ya no estamos tan seguros de nada. Ya no hay alegría en nuestro corazón. No somos los mismos. Podemos entonces rebelarnos y vivir ese momento como algo totalmente negativo que nos hace daño y mutila nuestro ser.



Pero lo podemos vivir de otra manera, como un desprendimiento o una pérdida que nos llevará a asentar nuestra vida sobre bases más firmes. Jesús hablaría de una poda necesaria para dar más fruto.



Si sabemos recorrer un itinerario humilde y confiado, «perder» nos puede conducir a «ganar». Hemos de empezar por aceptar nuestra situación. No es bueno negar lo que nos está pasando, ni disimularlo ante nosotros mismos y ante los demás. Es mejor reconocer nuestra limitación y fragilidad. Ese ser frágil e inseguro, poco acostumbrado a sufrir, también soy yo.



La crisis nos obliga a preguntarnos por nuestras raíces: ¿cuál es la verdad última que nos motiva e inspira?, ¿dónde se apoya realmente nuestra vida? Hay una verdad rutinaria que nos mantiene en el día a día, pero hay una verdad más honda que, tal vez, sólo emerge en nosotros en momentos de crisis y debilidad. El creyente vive este proceso como una experiencia de salvación. Ahí está Dios sanando nuestro ser. Y el mejor signo de su presencia salvadora es esa alegría interior humilde que poco a poco se puede ir despertando en nosotros. Una alegría que nace del centro de la persona cuando se abre a la luz de Dios.



Tal vez estas experiencias nos pueden ayudar a entender ese lenguaje difícil de Jesús que, en contra de toda lógica de apropiación y seguridad, propone la desapropiación y la pérdida como camino hacia una vida más plena: «El que se ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece en este mundo, se guarda para la vida eterna».



El relato evangélico nos presenta a Jesús como el hombre que, en el momento de la tentación o la crisis, sabe «perder» para «ganar» la vida.





TENTACIONES:  Lucas 4, 1 – 13



Los cristianos de la primera generación se interesaron muy pronto por las «tentaciones» de Jesús. No querían olvidar el tipo de conflictos y luchas que tuvo que superar para mantenerse fiel a Dios. Les ayudaba a no desviarse de su única tarea: construir un mundo más humano siguiendo los pasos de Jesús.



El relato es sobrecogedor. En el «desierto» se puede escuchar la voz de Dios, pero se puede sentir también la atracción de fuerzas oscuras que nos alejan de él. El «diablo» tienta a Jesús empleando la Palabra de Dios y apoyándose en salmos que se rezan en Israel. Hasta en el interior de la religión se puede esconder la tentación de distanciarnos de Dios.



En la primera tentación, Jesús se resiste a utilizar a Dios para «convertir» las piedras en pan. Lo primero que necesita una persona es comer, pero «no sólo de pan vive el hombre». El anhelo del ser humano no se apaga alimentando su cuerpo. Necesita mucho más.



Precisamente, para liberar de la miseria, del hambre y de la muerte a quienes no tienen pan, hemos de despertar el hambre de justicia y de amor en nuestro mundo deshumanizado de los satisfechos.



La segunda escena es impresionante. Jesús está mirando el mundo desde una montaña alta. A sus pies se le presentan «todos los reinos» con sus conflictos, guerras e injusticias. Ahí quiere él introducir el reino de la paz y la justicia de Dios. El diablo, por el contrario, le ofrece «el poder y la gloria» si se le somete.



La reacción de Jesús es inmediata: «Al Señor tu Dios adorarás». El mundo no se humaniza con la fuerza del poder. No es posible imponer el poder sobre los demás sin servir al diablo. Quienes siguen a Jesús buscando gloria y poder viven «arrodillados» ante el diablo. No adoran al verdadero Dios.



Por último, en lo alto del templo, el diablo le sugiere buscar en Dios seguridad. Podrá vivir tranquilo, «sostenido por sus manos» y caminar sin tropiezos ni riesgos de ningún tipo. Jesús reacciona: «No tentarás al Señor tu Dios».



Es diabólico organizar la religión como un sistema de creencias y prácticas que dan seguridad. No se construye un mundo más humano refugiándose cada uno en su propia religión. Es necesario asumir a veces compromisos arriesgados, confiando en Dios como Jesús.





¿VIDA HUMANA O SIMPLE BIENESTAR?



El hombre actual ansía vivir cada vez más, cada vez mejor, cada vez más intensamente. Pero, ¿vivir qué?, ¿vivir para qué? Se dice que estamos mejor equipados que nunca para vivir una vida sana y de mejor calidad. Pero, ¿qué es un hombre sano? ¿Qué es una vida de calidad humana?



Hemos hecho la vida más larga, más cómoda y placentera, pero, ¿no la hemos hecho también más vacía, superficial y absurda? ¿Es éste el camino para satisfacer la necesidad profunda de vida que se encierra en el ser humano?



Hay además un hecho cultural sobre el que parece existir una conspiración de silencio y es que cada vez se medita menos sobre el sentido último de la vida. Desconectada de toda relación con el Creador, privada de destino trascendente, la vida del hombre contemporáneo se está convirtiendo en un episodio irrelevante que hay que llenar de bienestar y de experiencias placenteras.



Sin embargo, ¿es verdadero progreso entender y vivir la vida de manera tan rudimentaria y tan pobre de contenido, de horizonte y de sentido como lo hacen hoy no pocos hombres y mujeres?



Por otra parte, para muchos, «bueno» es lo que produce bienestar, y «malo» lo que causa malestar. Pero el concepto de bienestar es ambiguo y no coincide necesariamente con la verdadera realización del ser humano.



Un joven puede tomar alcohol o droga para sentir «bienestar», pero, evidentemente, su actuación no es sana. Una persona puede sentirse bien en medio de una sociedad injusta, ocupándose exclusivamente de su bienestar y olvidando el sufrimiento de los más débiles y marginados, pero difícilmente podrá decirse que es sana esa insensibilidad.



Por eso, no es superfluo preguntarse qué bienestar buscamos, qué contenido le damos a nuestro deseo de calidad de vida y en qué hacemos consistir el progreso del ser humano.



Estas palabras de Jesús también necesitamos escucharlas hoy: «No sólo de pan vive el hombre.»



La verdadera calidad de vida no debe ser confundida con el «índice de renta nacional», el desarrollo industrial o el crecimiento del consumo. No es bueno todo lo que aumenta el bienestar material, ni malo lo contrario. Es bueno aquello que le ayuda al hombre a crecer como persona en todas sus dimensiones.



Calidad de vida, ¿para quién?



¿Calidad de vida para todos, o sólo para mí y los míos?



¿Calidad de vida para los parados, o bienestar exclusivo para los instalados?



¿Calidad de vida sólo para los europeos o para todos los hombres?